
Competencias del futuro en los despachos profesionales: adaptarse o quedarse atrás
La transformación digital, la irrupción de la inteligencia artificial, la consolidación del trabajo híbrido y la dificultad para atraer talento joven no son retos lejanos: ya están reconfigurando el presente del sector de los despachos profesionales. En este nuevo contexto, no bastará con adoptar tecnología o externalizar procesos: será imprescindible desarrollar nuevas competencias humanas y organizativas.
El informe “El futuro del trabajo” del IESE (junio 2025) deja claro que las empresas no solo están demandando conocimientos técnicos, sino un conjunto de capacidades transversales y actitudes que definirán el éxito en los próximos años. ¿Están los despachos preparados?
1. Del conocimiento técnico a las competencias transversales
Los despachos profesionales han basado históricamente su valor en el conocimiento experto: normativo, contable, jurídico o fiscal. Sin embargo, ese saber técnico ya no es suficiente. En un entorno donde la información está más disponible y la tecnología automatiza tareas rutinarias, lo que diferencia a un despacho es la capacidad de anticiparse, pensar estratégicamente, comunicarse con claridad y generar confianza.
Competencias clave:
- Pensamiento analítico y estratégico
- Capacidad de aprendizaje continuo
- Resolución de problemas complejos
- Comunicación clara, empática y adaptada a distintos perfiles de cliente
- Gestión de la incertidumbre
Reflexión para el directivo: ¿Tu equipo sabe explicar con claridad una reforma legal a un cliente no técnico? ¿Puede anticipar el impacto de una nueva normativa sin que se lo pidas?
DESPACHOS PROFESIONALES (CDDP)